El desafío principal del siglo XI es el desarrollo y la implementación de metodologías que al mismo tiempo que fortalezcan la economía mejoren el ambiente, mientras se logra un óptimo aprovechamiento del espacio disponible. Además se debe buscar la sostenibilidad de los procesos de producción y consumo en las zonas costeras. Esto es esencial para lograr una huella mínima al nivel global. La huella ambiental se puede considerar en función de la población, estilo de vida y tecnología.
El ambiente, inclusive la naturaleza, tiene cuatro funciones básicas importantes:
Función de Carga, ofreciendo espacio y habitat / sustrato para todos organismos vivos y otra materia orgánica e inorgánica, paisaje terrestre y marino, sistemas energeticos y todos los procesos antropogénicos y no antropogénicos.
Función de Producción, a través de exploración, explotación, cosecha de materales inorgánicos y orgánicos en los compartimientos ambientales aire-agua-suelo, y a través del uso y la conversión de todas formas de energía.
Función Reguladora, manteniendo los ecosistemas esenciales, así como otros sistemas y procesos, incluyendo el ciclo bio-geoquímico, el clima y el ciclo hidrológico, el carbono, el azufre, el nitrógeno y el ciclo del fósforo.
Funcion Información, Suministrando información en muchas formas para una variedad de fines conocidos y desconocidos. Algunos de los fines conocidos son: ciencia pura, investigacion aplicada y desarrollo, educación, cultura e historia, recreación y experiencia, visión e inspiración.
Fortalecer la economía y mejorar el ambiente se logra a través de la aplicación del concepto Construir con la Naturaleza, la creación de nuevas reservas naturales, una zonificación detallada de las varias funciones, y la introducción del enfoque Triple-C. Con respecto a este último enfoque se debe tomar en cuenta que en cada zona costera siempre hay procesos de conversión inducidos por el hombre, en el campo de la industria, centrales eléctricas, agricultura y acuicultura, en el transporte y distribución, en el sector servicios asi como en el sector doméstico.
En el futuro directo, los procesos de conversión deben ser desarrollados e implementados, de manera que con menos materias primas y con menos energía, se obtengan productos con más alto rendimiento y con menos emisiones peligrosas al aire, el agua y el suelo, y con menos productos de desecho. Los productos deben ser relativamente favorables al medio ambiente durante su vida y después de esta. En los casos donde se forman productos de desecho, deben ser reciclados o convertidos en productos respetuosos del medio ambiente, o cuando esto no sea posible, se almacenarán de forma segura. Clean Technology (tecnología limpia integrada en el proceso), Productos Limpios (productos útiles que durante su vida y después de esta son relativamente favorables al medio ambiente) y limpieza-up Tecnología, basado en el enfoque Triple-C, son instrumentos útiles para lograr - a su debido tiempo - el desarrollo sostenible.
Una cooperación armoniosa con las autoridades pertinentes en los distintos niveles de gobierno, con las organizaciones no gubernamentales y grupos de ciudadanos, es un requisito previo esencial para lograr el desarrollo integrado sostenible y multifuncional de las zonas costeras.